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Mi gran amigo el miedo

 

Vivimos con miedo.

Un miedo paralizante, limitante que nos despoja de todo lo que somos y podemos ser. 

Hasta que no te des cuenta de que eres tú quién lo engordas con tus pensamientos negativos sobre un futuro que no conoces o un pasado que ya fue, no te dejará en paz.

Pero el miedo también te protege. 

Te avisa del peligro, de las malas decisiones, de las acciones impulsivas sin pensar…Te hace parar y reflexionar. 

Dicen que la vida está detrás del miedo, pero no. El miedo forma parte de la vida. 

Da igual que te quedes en tu puesto “seguro” de funcionario o decidas lanzarte con tu primer emprendimiento. Da igual que tengas millones en la cuenta o solo tengas números rojos. 

Da igual que tengas hijos o vivas solo. Da igual que viajes o te quedes encerrado en tu habitación jugando al Zelda. Da igual que lleves una vida saludable o te machaques comiendo donuts en el sofá. El miedo siempre te acompañará. 

En el mundo de los negocios solo veo miedo. 

Miedo a fracasar, miedo a triunfar, miedo a ser indiferente, miedo a ser rechazado, miedo a delegar, miedo a no ser suficiente, miedo a fallar a la gente que confió en ti, miedo a la incertidumbre, miedo a Hacienda, miedo a vender…

Miedos que se esconden detrás de frases como..

“no vendo lo suficiente”, “no logro transmitir todo el valor de mi producto”, “este tipo es un vendehúmos”, “no necesito forrarme, me conformo con lo justo para vivir”, “mi negocio no despega”, “no sé de qué escribir en redes sociales”, “me da cosa poner el precio tan alto”…

La única forma que conozco de afrontar el miedo es cerrar los ojos, taparme la nariz y saltar. Siempre he pasado a la acción.

Cuando con 30 años me dieron la oportunidad de dirigir una asociación sin ánimo de lucro sin experiencia previa como directora. Cuando tuve que dar mi primera rueda de prensa. 

Cuando presenté mi primer libro. Cuando tuve que hablar delante de 500 personas. 

Cuando tuve un accidente de moto que me dejó en silla de ruedas tres meses y con muletas siete. Cuando dejé mi trabajo de 15 años por mi sueño de emprender. Cuando escribí mi primer post viral. Cuando gané mi primer cliente. Cuando me quedé sin clientes. 

Cuando en menos de un año posicioné mi marca personal en el sector del copywriting. Cuando trabajé con personas que admiraba. Cuando el trabajo me ahogaba. Cuando perdí el foco…

Todo lo he hecho con miedo. 

Y tal vez, ese sea el secreto de mi propio éxito. 

La razón por la que hoy por hoy soy cofundadora (junto a Toni Colom) de PuroArde, un estudio de brandoing para startups, además de mentorizar a negocios y marcas digitales a mejorar sus ventas, ganar diferenciación y adquirir autoridad con una buena estrategia de comunicación persuasiva. Y, por supuesto, sigo haciendo grandes entrevistas con mi querida amiga y compañera Inés Díaz en «Copywriting, Ventas y Nada que Perder».

Por eso, haz lo que quieras a pesar del miedo.

Por si te has quedado con ganas de conocerme un poco más

“Mi niña es la mejor. Ha estudiado mucho y trabajado mucho. Solo le falta encontrar novio”.

Isabelmi madre

“Ni frío ni calor, La Lechera es la mejor. También te puedo decir los Reyes Godos”.

Pepemi padre

“¡Y todo este rollo para esto! La próxima vez me lo resumes en tres líneas que tengo que ver una serie”.

Carmenmi hermana

“Cuñaaaaaaaaaaaa…”.

Javiermi cuñado

“A pesar de sus neuras, la quiero mucho”.

Maricelimi amiga del alma

“Me preocupa. Habla sola”.-

Kitymi gata